lunes, 21 de enero de 2008


Entre ceniceros bibalbos
Se perfilan perfectas en sus miradas
Cuatro rubias tirantes.

Gin-tonic usado
Tras los lentes ahumados
Y un diario sin leerse
Espera expectante Stella a su Andrés

Una cascada de madera
Truena contra el piso
Ripiado, amarronado, esperando parquizarse
Con el fin de un glamour extraño.

Cuatro rubias, un Andrés y Stella que espera
Entre trago y trago que el Gin –Tonic usado
no le quite cartel esta noche

Tráeme tus ceniceros bibalbos
Tráemelos nena
Quiero apagar mis puchos
en tus ceniceros bibalbos

Oh nena,
Que el mar rompa las olas
Te necesito cerca,
para apagar el fuego de este pucho
(que es mucho)
Nena, te necesito esta noche




Poesía colectiva

1 comentario:

Anónimo dijo...

aguante claromeco menos los chetos que alli gustan salar sus motores