Realmente podría olvidarme de todo en un momento, decir que no importa y la inercia. No sería muy difícil: fanatizarse en el estímulo de una cosa euforíca, simular el placer y creerlo violentamente cierto, beber de la risa y saberme tan transgresor en el infortunio de una nada contra otra nada, oh! nada importa y no me importa!. Pero es mentira y no voy a hacerlo.
Decido entonces ser un tanto más patético, poner en juicio mi accionar y culparlo de todo, someterme a la lupa y encontrar verrugas y agujeros y manchas, decirme feo e idiota y torpe y realmente verme en la gloria y la mierda que significo.
Sospecho que nunca antes entré en este hueco, nunca realmente me hice cargo de todo, nunca valiente ni ariesgado como ahora que me humillo y santifico hasta entender que soy. Si lo logro seré honesto y si no un mero fiasco, pero es ahora en el silencio que me hablo abiertamente, es el riesgo que corro lo que me impulsa, la nada aparente de la aparente reclusión, al borde de lo indeseable como mi carne y la escupo.
Si voy a salir y voy a explotar quiero que al verme me vean a mi, rompo el modelo idealizado y sólo seré lo que construya, borro la pose y la imitación, borro el fantasma y la sombra, borro mi engaño, borro la carga y me enfrento desnudo al designio total que en la tierra me deposita. Si voy a dirigirme hasta tan lejano punto haré que en el camino mis pies se deslicen, que se muevan suaves, luminosa mente, como esa verdad.
: . Naz
ph: Macabea
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