jueves, 6 de septiembre de 2007

nueva condición




Súbitamente se encienden paralelas y adyacentes vertiginosas líneas al interior, avanzan en prófugo y acelerado encandilante trayecto y me atrapan en el delirio momento
de su velocidad, van tras mí y me atrapan en la red infinita a la que se extiende la succionante aparición. Despierto en la dimensión autocreada de un pensamiento, invento este sitio y estoy dentro de él, es un envase a fin de cuentas, pero acá dentro la noción es de eternidad. Subo y escalo y navego en los aspectos otrora distantes, como una Internet conectando todo lo concebible. Y el invento en la llegada de su clímax explota en luz blanca y soy la mente y caigo luego a mi individualidad objetiva pero limitada y soy atraído y expulsado y desintegrado una y otra y otra vez. Esto de ser un pensamiento muriendo a cada instante y volver a ser otra cosa. Este comando que empieza a aparecer, veo sus palancas, algunos de los botones y dispositivos. Si, aparece el inmenso ventanal y es después pantalla y observo y controlo a la mente por un momento. Cuando revienta el último piso y con él la terraza y lo que queda es una encadenada explosión en los cielos hasta que explota luego el todo y uno desciende nuevamente a su individualidad, como goma se estira y emite representaciones, simulacros de los hechos futuros y uno es una y otra cosa.
.Naz

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